Navidad

Sé q la gran mayoría de los que pasan por este blog no están del todo contenta con estas fechas. Es más, podría asegurar que muchas están deprimidas, de un humor de perros y con ganas de gritar y salir corriendo para escapar de lo que no se puede escapar, porque es el miedo que está dentro de cada una. Yo me siento así. Y entiendo muy bien lo que posiblemente toda persona con problemas alimenticios siente.

Pero a pesar de este terror que siento, sólo quiero pedir unos minutos para reflexionar. Después de todo, de eso se tratan estas fechas.

No pido que coman. No pido que no vomiten. No soy quien para sugerirlo, puesto que yo no c si lo haga o no. Lo único que les pido es que no centren estas festividades en la gran cena navideña, sino en lo que todo este cambalache mercantilista significa:

Unión.
Paz.
Amor.
Armonía.
Luz.
Esperanza.
Bondad.
Y más amor, que es lo único que puede curar el alma.

Sé que no todas tenemos una familia unida, o quizás este año la pases sola, o no tengas muchos amigos a quienes saludar, ni tan siquiera ganas de celebrar algo que quizás para muchos no signifique nada; sé que la perspectiva de tener que sentarse a una mesa llena de familiares felices y platos de comida no es realmente atractiva… Pero me gustaría que en estas fechas tratemos de olvidar por un momento todo el dolor, la rabia y el miedo que podamos sentir, y tratemos de disfrutar este momento que debe importar más que cualquier cosa que pueda llegar a nuestros estómagos.

Agradezcamos que aún tenemos sangre (Anémica o no) en nuestros vasos, impulsos nerviosos (deficientes o no) en nuestro cerebro, potencia (suficiente o no) en nuestros músculos y una mirada en nuestros ojos, y celebremos que hace más de dos mil años alguien nació para darnos una esperanza de vida, para marcarnos un camino que más allá de convertirse en religión mundial, en principio fue sólo una opción de filosofía de vida a seguir. No es necesario que creas en él como si fuera un Dios, basta con saber que fue un ser humano especial, tanto como Mahoma o Ghandi o tantísimos otros que marcaron a la gente de su entorno.

Olviden que la comida es combustible para el cuerpo, y enfóquense en estar con la mente disponible para las personas con quien lo pasen. Y si están sol@s, recuerden que alguien piensa en uds y q siempre vale la pena sonreír porque todavía se puede.

Les deseo una muy Feliz Navidad, llena de calor, amor y armonía :)