Corazón de Cristal

Si no tienes tiempo ni ganas d leer, pasa al post d arriba. Esta entrada es larga, ya que cuenta la historia que nunca conté.

No c q me pasa. Un momento estoy bien, pero de pronto me doy cuenta d las cosas y entonces me caigo a mi hoyo, y sólo quiero vomitar y vomitar. Pero estoy tan cansada d comer y vomitar, xq he vomitado tanto este fin d semana q no tengo más ganas d hacerlo, que no quiero comer más. No quiero hacer nada. No quiero transcribir, no quiero salir, no quiero hacer más q dormir y estar echada en mi cama lyendo. Y no lo hago xq sino me quedo ahí y no hago las cosas q debo hacer. Tengo miedo d todo, d llegar a mi casa, d q sea hora d almuerzo o la cena, tengo miedo de despertarme y enfrentar el hecho de que tengo que comer ese día, xq sé q no soy fuerte como para un ayuno.

Hace un mes que se me dio por vomitar. Sólo han sido 4 días de los 31 días de octubre que no he vomitado (Y eso). Cada día ha sido como un año. En cada vómito no sólo me quito la comida, sino tb un poco d vida. Siento que ha sido un siglo, pero no puedo dejar d hacerlo.

Recuerda alguien que hace un par d meses escribí acerca de las señales que me caían del cielo, y q había una canción en especial que me perseguía todo el día? Bueno… esa canción está sonando ahorita en mi mp3. “Ten fe, la ilusión no debe morir”: Q ilusión? Fe en qué? No es que hayan demasiados problemas a mi alrededor, lo he dicho mil veces: la situación sería aguantable si yo estuviera dispuesta a soportar el peso. Pero estoy cansada. Estoy muy cansada. No quiero volver a escribir la misma candaleta q escribo cuando estoy deprimida, pero a veces siento q necesito decirlo mil veces, no c. Habrán milagros hoy si tengo fe… Qué milagro, si no espero nada? Fe en qué?

No c q me pasa hoy. Me he sentido bien, he estado tranquila, pero es como si hubiera sido sólo una pantalla para aparentar ser fuerte, una chica feliz x fuera pero muerta x dentro, sólo para poder "seguir siendo yo", presente para quien necesita de mí, y no alertar a mi mamá (Q d todas formas no se alertaría demasiado a menos q le cuente la carnecita del problema). No he transcrito en todo el fin de semana xq me lo he pasado comiendo y vomitando, la he pasado bastante mal. Me pesé ayer: 53,3. He bajado d nuevo, pero no me siento conforme, es más, me siento más gorda con todo lo que trago. No importa si es una gota d agua o si son unas hojuelitas de los corn flanes azucarados q compró mamá, siquiera si es un té con miel: siento que me hincho, que mis piernas quieren estallar, que mis rollos del abdomen van a rebalsar el pantalón, que mis brazos parecen de picaronera. No me aguanto ni 100 gr más llenita q antes de comer. No me puedo imaginar cómo pude aguantarme a mí misma con 10 kgs más, y con tantas ganas de salir adelante y con tantos planes a futuro. Eran esos kilos la única diferencia con mi actual yo?

No.

Es que en ese entonces había alguien q me acompañaba. Que se convirtió en mi mundo, que me hizo olvidar todo lo mal que la había pasado, que me conocía y me observaba y me entendía y quería pasar el tiempo conmigo. Que no estaba conmigo todos los días pero cuya presencia me hacía querer llegar al siguiente fin de semana, cuando lo volvería a ver y me haría reír con sus locuras y me diría para perder el tiempo luego de la función.

Sí, otra vez Bruno.

Nunca conté la historia con él, cierto?

Sí, creo q no lo llegué a hacer. Esperaba el momento indicado para hacerlo, o lo prometía, pero a la hora de la hora no terminaba d escribir o no podía postear. Pues bien. No quiero hacerla larga. Para redondearlo podría decir que para mí era el chico ideal. Así, con sus muchísimas virtudes y sus desastrosos defectos, (Porque no estaba tan ciega, sabía que tenía defectos), era perfecto. Bruno no es guapo, para nada, pero tiene algo que me volvía loca. Por lo demás, se roba el corazón de quien lo conoce, porque es la chispa de alegría de donde quiera que esté; es super inteligente, super maduro, super divertido, super bondadoso… chicos como él no se conocen a menudo.

(Estos son fragmentos de los muchos párrafos que escribí y que nunca publiqué, porque no estaba terminado. Si no tienes ganas d leer, salta todo lo que esté de morado.)

No recuerdo haber estado mejor q cuando él estaba a mi costado, caminando por la ciudad sin rumbo fijo y sin hora límite más que la de la prudencia y el cansancio. Con él mi vida era un remolino lleno de cosas x descubrir. Sin él todo es tan pacífico que me asusta. Me temo q siempre voy a sentir por él una ternura indecible. Cuando estoy con él siento tantas cosas q simplemente no sé q siento (Esto era hace meses. Ahora no siento nada más que pena y vacío, el que él dejó). Sólo sé q estoy viva, xq él me activa, me saca de mi sopor haciéndome sentir todo eso. Y me mata tb. Tiene un poder impresionante sobre mí, me ha marcado mucho y hasta podría decirse q todo lo relacionado con él es como todo debería ser.

No es q Bruno sea la gran cosa: de hecho, es una persona bastante normal. Pero para mí, las cosas q lo hacen ser humano son simplemente excepcionales, quizás es así porque no conozco nada mejor (Tengo 20 años y tanta calle como una niña), y tiendo a idealizarlo hasta puntos estratosféricos. Creo q lo único q no he hecho es formar un club d fans y armar un altarcito en mi closet (A lo Helga Patacky, de Hey Arnold!... X cierto, él solía llamarme así)

Qué puedo decir de él que no suene subjetivo?

1.75 aprox, flaquísimo pero ha sacado algo de músculos x su trabajo, típico peruano promedio. No resaltaría en la calle cuando pasa, ni nadie voltearía para mirarlo, xq guapo no es. Sin embargo tiene un algo q lo hace irresistiblemente atractivo. Es, sin duda, una persona muy simple, y x eso me gusta. No tiene grandes vanidades como otros chicos q conozco q se creen los papis, no: Bruno sabe q no es un adonis y tp trata d parecer lo contrario. Él es como es, lo sabe muy bien.

Hace lo que quiere hacer porque le nace hacerlo cuando le nace hacerlo, sin malicia, aunque no siempre sean cosas debidas. Es de esas personas que se dejan llevar por sus impulsos sin pensar mucho en las consecuencias. Llama la atención de las personas sin proponérselo, resalta. A veces puede ser tan hablador y bullicioso q llega a lo escandaloso. Ha sufrido mucho, pero sabe superar las cosas q le pasan y siempre muestra una sonrisa. Son muy raras las veces q lo he visto realmente deprimido, y aún así siempre conserva el buen humor. Le encanta molestar a la gente y hacer bromas a costa de uno, y sin embargo, es muy muy muy reservado con sus asuntos personales, es muy discreto con sus cosas y sabe guardar secretos. Y a veces, puede pecar de poco expresivo verbalmente cuando se trata d hablar de lo q siente. Le encanta divertirse irresponsablemente pero jamás descuida sus responsabilidades porque (contradictorio) entiende que todo tiene una consecuencia. Así, se puede amanecer toneando y tomando como loco, pero al día siguiente va al trabajo o a sus clases. Es muy inteligente, aunque no lo parece. Sus respuestas son bien pensadas, muchas veces para sacarles el lado gracioso a las cosas q se dicen, y reacciona como una persona madura y centrada frente a los imprevistos o las situaciones difíciles. Es de esas personas a las q uno jamás se imaginaría estudiando, sin embargo siempre saca buenas notas xq sí estudia. Es curioso e hiperactivo, no puede estarse quieto. Tiene un corazón enorme, es muy tierno con los niños y la gente necesitada, es muy bien educado con los desconocidos y muy caballeroso con las mujeres. Es muy religioso, aunque no lo parezca. Y no teme saltar en defensa de lo q cree. Es muy muy romántico, cariñoso y detallista. En exceso. Soñador, sensible, es capaz de llorar si algo le emociona o le hiere. Apasionado con las cosas q le gustan, muy dedicado cuando algo le interesa realmente (Y muy descuidado cuando no le importa). Siempre, siempre consigue lo que quiere, siempre se sale con su gusto, porque como me dijo muchas veces, no le gusta perder y puede ser muy picón. Se puede conversar DE LO Q SEA con él, siempre va a tener una respuesta inteligente (O chistosa) o t va a escuchar atentamente si no entiende. No siempre tiene un consejo q darte, pero es una excelente compañía para cuando quieres reír, llorar, filosofar o pasar bien el rato sin hacer nada más q tonterías. Es muy juerguero, sale casi todos los fines d semana y mata sus neuronas tomando y fumando como desquiciado (Aunque generalmente fuma más cuando está nervioso o estresado), tiene buen ritmo para bailar (Sobretodo salsa! Gracias a él me encanta bailar salsa!), es entonado para cantar, no dibuja nada bien, le gusta el arte en general pero sobretodo está el teatro, su pasatiempo y gran pasión junto con los autos, su carrera (Sonará simplón, pero estudia mecánica automotriz. Siempre va al teatro con las manos con algunos residuos de grasa). Q puedo decir, ama vivir. Y entiende q la vida no debería ser un constante sufrimiento.

Sin embargo, es un ser humano y tiene defectos. Muchas veces no mide lo q dice o hace y puede llegar a dañar. No se expresa siempre bien, tiene una forma d hablar criollezca q a veces es desesperante. A veces se pasa de relajado o le resta importancia a cosas q sí la tienen (Al menos en mi opinión, recordar q todo me lo tomo muy a pecho). Es impuntual, dice q le gusta q lo esperen y no esperar. Tb se la pasa debiéndole dinero a la gente (Siempre paga, pero se endeuda y eso no es sano) y por alguna razón siempre se gana problemas con la gente, q a veces no entiende su forma d ser tan abierta. El año pasado, por ejemplo, había un señor del taller de teatro con el q se llevaba mal xq tomaba a mal las bromas q Bruno hacía d él. Es de dejar algunas cosas para el final y se ha convertido en un alguien voluble. Pero quizás lo q más me duele d él es q ha roto muchas promesas q me hizo, hay muchas cosas q queríamos hacer juntos q nunca llegamos a hacer.

***

Lo conocí en un taller de teatro de una municipalidad que quedaba cerca de casa de ambos. Siempre me llamó la atención ahí, primero porque simplemnte resaltaba, luego por parlanchín y crítico, y después por buen actor. Pero dejé d ir y dejé d verlo. A los pocos meses (por casualidades de la vida?) terminé trabajando en el mismo teatro que él. Al principio no hablábamos mucho, luego él fue mi amigo secreto del taller y en la reunión de fin d año (2006) me regaló un perfume y una cartita, con lo q él empezó a llamarme la atención. Se fue de viaje x fin de año hasta enero y fui la única estúpida q lo extrañó sin motivo xq a pesar de todo no hablábamos mucho. Y así pasaron los fines de semana, cada vez nos acercamos más, noté q buscaba excusas para hablarme y yo excusas para que él me hablara. Un día cerca de mi cumpleaños se me hizo tarde para regresar sola a mi casa y le pedí a “alguno de los caballeros presentes” que me escoltara. Bruno se ofreció un poco resignado, pero fue tan chvr ir caminando desde el lugar del taller hasta mi casa que el tiempo pasó volando, sin darnos cuenta habíamos llegado al parque que hay al frente y hasta se quedó un par d horas más conversando conmigo. Se nos hizo costumbre hacer eso.

En mi cumpleaños del año pasado, día fatal como de costumbre, fue el único q me acompañó y me escuchó todo lo que me ponía triste ese día (En el q me pongo el doble d sentimental), y se encargó d recordarle al resto de la gente del teatro (Unas 15 personas) q aparecieran en mi casa. Empezaron a molestarnos con que éramos enamorados o algo así, tanto en el taller como en el mismo teatro donde trabajábamos. Casi siempre q salíamos del taller o del teatro, él me acompañaba caminando a mi casa, conversando de las cosas q nos pasaban, d lo q nos gustaba… Y un día, luego d 3 horas d haber estado hablando sentados en una d las bancas del parque, buscando algún tema de conversación que no hubiéramos tocado para q no se terminara el momento, le comenté un poco a propósito habían muchas cosas q no había hecho: “drogarme, emborracharme, fumar, tener relaciones y besar a un amigo con el que no estuviera en nada”. Él me dijo q había hecho las tres primeras, y que si quería podíamos sacar d la lista lo último. Me pareció chistoso, con él todo tenía algo de humor, y como estaba en mi época de probar cosas y divertirme queriendo cambiar mi manía d tomarme todo en serio, gracias a él pude decir que “había besado a un amigo con el que no estaba en nada”, agregando “y q encima tiene enamorada”.

Sí. Bruno tenía enamorada cuando pasó todo.

Y no sólo eso: la amaba. Tanto que siempre me hablaba d ella, d cuánto la extrañaba, de lo poco q la veía y d lo frustrado q se sentía xq ella no le daba su lugar, xq prefería estudiar o salir con sus amigas antes q con él. Siempre q tenía un problema o estaba triste, aparecía Cristal con un nuevo consejo y una razón más para enamorarse d él, xq era un imposible q jamás se fijaría en ella y xq con sus confesiones le mostraban su lado más tierno, más emocional, menos chonguero y más hombre.

Y así, entre confesiones y consejos, una noche nos volvimos a besar, esta vez en la puerta de mi casa, más en serio. Me molesté un poco, me sentí muy mal xq eso estaba muy en contra d mis principios, y le prohibí q sucediera de nuevo. Él me pidió disculpas y me dijo q no volvería a pasar, y yo confié en él. Y seguimos siendo muy amigos, cercanísimos, saliendo siempre después de funciones, hablando de su enamorada y d los problemas q tenía con ella, incluso aconsejándole volver o cómo tratarla o qué regalarle x los mesiversarios a pesar d q eso me dolía en el alma (Pero si le hacía feliz estar con ella...). Yo me contentaba con ser su amiga, quedarme conversando con él hasta las mil y quinientas en la calle sin imxtar el día, comprando algo de comer con lo poco q ganábamos y compartiéndolo, observando a las estatuas vivientes del parque cerca de la chamba y caminando hasta mi casa, simplemente haciendo y diciendo estupideces, que para ambos siempre resultaban “la primera vez” q lo hacíamos. Él era lo más cercano a un enamorado q nunca tuve.

La tercera vez q sucedió fue luego de haber estado con él casi 24 horas seguidas. Me estuve resistiendo por mucho tiempo xq no quería caer más en el juego, pero al final cedí. Fue mucho más tranquilo, y por lo mismo pudimos hablar. Me dijo q le gustaba mucho pero q no estaría conmigo y q estábamos bien como amigos. No quise quedar en ridículo, y le dije q estaba d acuerdo. La vez siguiente q le vi le mandé una carta diciéndole q no podíamos ser amigos hasta q él no dejara d buscar la oportunidad d besarme, q tenía q respetar a su enamorada y q me iba a alejar d él. A los días me dijo q no quería eso xq era su amiga y q más q haber sido infiel y habernos besado, le daba pena alejarse d mí. Que se portaría bien y no me haría más daño. Y quedamos como amigos. Y seguimos saliendo, solos y con amigos en común (José y Manuel), bailábamos juntos pegado toda la noche y levantábamos sospechas (Sobretodo él, q era quien se me pegaba, yo siempre trataba d no demostrar lo q sentía), seguía acompañándome a mi casa y tenía detalles conmigo q no tenía con nadie, ni siquiera con su enamorada (Es más, habían veces q no salía con ella x salir conmigo y los demás). Incluso varias veces trató d besarme, pero no se lo permití, xq no era correcto. Y lo perdonaba, y lo olvidaba, pero en el fondo esperaba q me convenciera (Q difícil soy!).

Sin embargo, así como se comportaba conmigo como si me quisiera (Vamos! Si quisiera realmente a su enamorada, xq quería besarme a mí?), aparecía en el teatro con ella (De quien me hice “amiga” x ser cercana a él), me hizo caso omiso en toda la celebración de su cumpleaños desde que ella llegó, y un par d veces llegó al teatro con que había terminado para siempre con la chica, lo cual me emocionaba x ser la siguiente en la lista, para días después venirme con que habían vuelto pues la pelea fue x una estupidez y que se aman más que nunca. La llamaba cuando estaba conmigo, yo tb los molestaba (Qué iba a hacer? Romper a llorar?) y se me hacía muy confusa toda la situación con él, xq un día me quería y al siguiente era su mejor amiga.

Dejé de verlo en diciembre del año pasado, xq me fui del teatro. Hasta ese momento siguió nuestra situación de “amigos cercanos”, con él queriendo pasarse de la raya, yo manteniendo las apariencias y tragándome las ganas de abrazarlo y besarlo y no soltarlo jamás. Me dijeron q como era temporada baja iban a poner las obras con menos personajes, lo cual lo incluía a él mas no a mí, pero me cayó de pelos xq mi intención era irme de todas formas, xq no soportaba seguir en el aire y necesitaba olvidarme d él, e impedir q él se siguiera confundiendo conmigo si es q en algún momento eso había ocurrido. Y nos volvimos a ver en enero, xq después d no habernos visto ni hablado x mucho tiempo me quería actualizar d una cosa para la cual me buscó en esas semanas q no nos vimos. Nos regresamos caminando a la 1 am desde la casa d Titi hasta la mía, demoramos fácil hasta las 3am xq no era tan cerca q digamos, y en todo ese trayecto estuvimos jugando y conversando y él intentando besarme, hasta q fue tan evidente que lo encaré y le puse las cosas claras. Y ambos dijimos lo que pensábamos y sentíamos x primera vez, y fue chvr xq supe q él fue sincero cuando me dijo q le gustaba mucho y me había extrañado pero se le hacía difícil terminar con su enamorada xq tenían mucho tiempo juntos, entre otras cosas.

Quedamos en pensar bien qué haríamos, mientras tanto seguiríamos siendo amigos. Pero supe entonces q no iba a funcionar: xq él hasta ahora no se había decidido x dejar a su enamorada y estar conmigo; xq yo no lo podría ver simplemente como un amigo; porque a pesar d q todo era verdad no me quería lo suficiente, y porque sabía q no era con él con quien iba a estar (Y yo tonta dejándome llevar x mis predicciones). A los días lo cité para decirle q lo mejor era dejar de vernos absolutamente y dejar de hablar y cualquier cosa, porque siempre iba a haber una oportunidad para que él intentara algo y yo me ilusionara. Y así fue. No nos vimos hasta un mes después xq no aguanté y lo busqué, pero luego d eso no nos volvimos a ver hasta mi cumpleaños (Xq él tuvo la delicadeza d acordarse y aparecer en mi casa para hacerme más deprimente el día), y luego en julio, xq volví a ese teatro. En todo ese lapso de tiempo, varias veces me dijo para vernos y le acepté, pero siempre sucedía algo q lo impedía. Supuse q era “el destino” y lo tomé bien. De hecho, apareció Antoine para confundirme y el que hacía de mi pareja, para distraerme.

Pero volví al teatro, y todo lo que tenía guardado reapareció, sobretodo xq a la segunda oportunidad q tuvimos d estar solos intentó besarme. La diferencia ahora es q aunque él ya era soltero oficialmente, había pasado más d medio año sin casi conversar y no me gustaba el que de la noche a la mañana sucediera eso, y mucho menos la idea de ser un simple agarre para él, algo casual q no iba a trascender; xq en el fondo seguía pensando en él, recordando todo, y queriendo una relación seria. Y estaba convencida d q él no me tomaba en serio. Si así lo hubiera sido en algún momento, habría hecho lo posible por arreglar las cosas, y si me hubiera querdio de verdad no se habría destrozado tanto cuando terminó con su enamorada definitivamente (por iniciativa d ella), siendo una posibilidad meses antes. Así q lo rechacé sin decir nada, y no mencionamos el tema en todo el tiempo que seguimos juntos esa noche. Luego d comentarlo con algunas personas me dijeron q no tenía nada d malo y q así muchas relaciones empezaban, y decidí q no podía ser tan grave dado q ya teníamos una historia y vamos! Acaso no quiero eso? Si no sucede nada más, lo cual era posible, no iba a ser suficiente con lo poco q pasara? Siquiera intentarlo, no? Eso era mejor q nada!

Así q decidida a aceptar que él se pasara d la raya conmigo (O a dar el primer paso), el siguiente fin d semana salimos en grupo El Mister, Titi, la mamá d Titi (Q tb trabajó con nosotros), él y yo. La verdad estaba un poco desanimada xq había vuelto a haber tragedia griega en mi casa x culpa de mi padre, pero quería darme la oportunidad d estar con él luego d tanto tiempo. La idea inicial era salir con los amigos d Bruno, pero nos invitaron a ver la obra del Mister y d ahí nos fuimos a tra parte y luego a una reunión d los amigos d Titi. Para colmo los amigos d Bruno le cancelaron, así q nos quedamos donde estábamos. Y como para coronar la noche, que de por sí estaba bastante accidentada y con él poco atento conmigo, se me ocurrió la brillante idea de tomar. Recalco lo siguiente: NO TOMO. No le veo el chiste. Pero esa noche, “para olvidar”, terminé borracha x primera vez (Tenía q ser con él), vomitando en el piso y contando mis más oscuros secretos. Bruno, además d tener q cuidar d mí como una niñera, xq cuando menos se lo esperaba salía corriendo tratando d escapar y “quemar calorías”, tuvo que escuchar que “mi padre no nos quiere”, que “tengo anorexia y tengo miedo d ser bulímica si Titi me hace vomitar para sentirme mejor” (xD En ese entonces vomitar era algo q ni enferma hacía, y gracias a q lo hice borracha como q le perdí el miedo), y q “lo quiero mucho pero él no me quiere nada y nunca me quiso”.

Esa noche, a pesar d q “se nos pasaron las manos”, no sucedió nada que yo no hubiera querido. Posiblemente él aprovechó q yo estaba ebria y con menos resistencia (Según dicen los testigos, yo fui la q se colgó d su cuello), pero aún dentro de la nube de alcohol me di cuenta d q la cosa se estaba descarrilando y le puse el pare. Si no hubiera sido xq hasta ebria tengo autocontrol…

No c q pensar de eso. Sólo me arrepiento d q él haya estado ahí. Xq a partir d entonces nada volvió a ser igual. Nada lo era, pero íbamos en buen camino d recuperar lo q hubo. Y la fregué toda. Fue mi culpa. Soy tan imbécil q no c cómo comportarme en este tipo d cosas, y siempre la cago. No c cuánto más le habré dicho, pero sé q fue muy hiriente xq él “no recuerda nada”. Desde ese día Bruno es distante, a pesar d q un par d veces nos hemos tenido que quedar solos x mucho tiempo cada vez cambia más…



Sé q quiere a otra chica, se lo dijo a Titi cuando me estaba cuidando esa noche. Lo confirman sus nicknames. Y lo que yo misma he escuchado, xq ahora su confidente consejera es Cecilia, y ella se cambia en el mismo camerino q yo x ser mujeres. Tb sé q al parecer la cosa con ella no ha funcionado. Pero ese no es el punto. En realidad me alegra q él rehaga su vida y siga adelante... Lo q me friega es q me excluya. En ese momento, quiero decir hace dos o tres meses, tenía la esperanza de tener una oportunidad d q quisiera tener algo conmigo, más allá de amistad incondicional y besitos y arrumacos cuando él tuviera ganas. Ahora lo único q quisiera es ser su amiga.

Bruno ha cambiado. Se ha convertido en un casi completo extraño para mí. De aquel chico inocente y tierno del que hablé al inicio, no queda más que el recuerdo. Porque ahora se las quiere dar de macho man con sus comentarios y sus juergas semanales y sus borracheras y quién sabe qué más. Me da pena q él se haya perdido, que se haya refugiado en eso desde q terminó con su enamorada. Me da pena que todo haya terminado así. Me da pena q nos hayamos alejado tanto, q hayamos perdido la relación tan especial que teníamos… Que él me haya olvidado a mí.

Xq me excluye notoriamente de las cosas q hace. Cuando antes era a quien recurría cuando necesitaba una segunda opinión o simplemente reírse de algo, ahora con las justas me saluda. Xq no le interesa lo q hago, ni saber lo que me sucede. Xq se nota que está incómodo con mi presencia, xq dejé d ser su “gringa bonita” para convertirme en la cuasi ex y q por lo mismo, nada d lo q me ocurra le incumbe y viceversa.

Han pasado semanas sin casi hablar. Un par d bromas pesadas por aquí, quizá alguna pregunta o intercambio de palabras necesario por allá, la mayoría del tiempo sin siquiera mirarnos. Hoy noté un ligero cambio. Se echó a mi costado, apretados, en la cama de utilería d la obra. Me dijo en tono d broma q como me desmayara hoy me tiraba como papel higiénico a la basura. Y se despidió de mí con un abrazo largo. No entendí por qué era, hasta q me enteré q él no va a estar el próximo fin d semana. Y él sabe q el prox fin d semana es mi último ahí.

Ya no lo veré más, entonces.
No c si alegrarme o ponerme triste por eso.

Desde hace varias semanas ni siquiera el saber que lo voy a ver me anima. Ni siquiera me causa ilusión que sea sábado xq él va a estar ahí, dándome vida y quitándomela al mismo tiempo. Es más, es un pesar saber que será incómodo su rechazo y sus comentarios en voz alta acerca de chicas y sus muchas actividades, ninguno dirigido hacia mí. Pero no c q pensar ahora q sé q no lo veré, d nuevo, quién sabe hasta cuándo. Sólo sé q me da mucha pena. Demasiada. Xq ninguno d los dos queríamos perdernos, y nos hemos perdido mal.



Me encantaría saber qué piensa, qué siente. Me encantaría entenderlo. No sentirme tan frustrada y corta por no saber cómo acercarme. No sentirme tan insignificante y poco interesante cuando le digo algo, sin capacidad d seguir una conversación inteligente y contestarle sin tartamudear o perder el hilo (Lo cual me sucede con la mayoría d personas ahora). Ser la Cristal q antes le arrancaba burlas. Cuánto daría porque todo volviera a ser como antes! Cuánto daría por volver a estar con él y caminar horas y horas sin rumbo fijo, y conversar y reír sentirme querida y valorada y alguien importante para otra persona! Simplemente no estar fuera d su vida, xq él me imxta y mucho! Hace tiempo q pasó todo esto y yo ya debería haberlo olvidado. No c si es q no puedo o no quiero, xq incluso no quiero ni espero absolutamente nada con él, pero como dije antes, desde q todo terminó, no he podido divertirme de verdad, y eso es hace mucho tiempo. Él se llevó toda mi alegría. Y me quita el resto de lo que me queda cada vez q no me mira o pasa d largo, como si no existiera.

Si hasta hace unas semanas no existía para él, ahora no existiré con mayor razón. Porque ya no tendrá q soportar mi presencia. Podrá ser libre de hacer y decir lo que quiera, podrá ser feliz, xq no tendrá q censurarse gracias q yo esté ahí en el teatro. Sólo he sido un estorbo para él, una muñeca que utilizó cuando necesitaba cariño. Y ahora q no le sirvo y por fin podré desaparecer, podrá se feliz. Xq no me quiere, no signifiqué nada para él, sólo le doy pena y rechazo. Volveré a estar fuera de su vida, más d lo q ya estoy. Y él, de una buena vez, saldrá d la mía definitivamente. Y me quedaré más vacía.




Ya no. Ya no más. No más Bruno. Nunca más. Ahora sí es en serio.