Adultos

El viernes pasado fui en la mañana a mi colegio, a visitar a mis profesoras. Mi hermana me tuvo que sacar de mi cama, xq me había dormido tarde y moría de sueño (Aunque no tanto como ahora). Sólo cuando estuve ahí me di cuenta d cómo extrañaba ese mundo, d cuánto había vivido ahí, d todo lo que significaban las personas, los pasillos, los salones, todo. Las “fraus” nos saludaban con cariño, algunas más q otras (Así les decimos a las profesoras, aunque literalmente frau en alemán significa señora).

Desde muy chiquitas nos conocían, a mí xq siempre salía en las actuaciones cantando o actuando (“¿¡¿¡¿¡Tú eres la que cantó x el día del maestro cuando estabas en 1° grado de primaria, no!?!?!?” ¬¬, “me hiciste llorar!!!”), sacaba buenas notas y me dormía en clases (En secundaria). Al principio era una muda q no hablaba con nadie y q según todo el mundo iba a ser monja, y luego cuando fui sintiéndome mejor y me enamoré, empecé a saltar x todas partes, hacer garabatos en la pizarra y reírme de todo (Los antidepresivos q tomaba me hacían hablar y estar feliz aunq siempre sentía q no lo estaba realmente, q todo era hueco. Aprendí q las emociones son distintas a los sentimientos, yo seguía triste pero me emocionaba x todo). Y a Valeria la conocían primero xq es mi hermana menor, y luego xq poco a poco se fue haciendo amiga de todo el mundo, se metió a pastoral y con lo amigable q puede ser cuando quiere se ganó a todo el colegio. Tiene un montón de “hijas” y las profesoras la aman. Al enterarse q mi hermana no iba a poder tener su certificado de estudios xq mi papá hasta ahora no ha terminado de ponerse al día en las pensiones del colegio y x eso no iba a poder estudiar ninguna carrera, aparte de que no le quiere pagar algo caro como una universidad, y como sabía lo buena persona q es, una d las fraus d alemán le regaló una waflera para q se recurseara vendiendo waffeln en el kiosko. Normalmente la plata d las cosas q se venden ahí van para Miramar, un pequeño colegio al q mi colegio respalda económicamente (Siempre nos hacían llevar 1 kilo de algún alimento no perecible al mes, nosotras nunca llevábamos xq no había plata para comprar o me olvidaba y siempre nos regañaban. Como eso era una actividad de pastoral, Valeria a veces se acordaba, y me decía q yo era desconsiderada). Pero volviendo al tema, esa frau consiguió que la mayoría de la plata q ganaba vendiendo sus waffeln a 50 céntimos cada uno fuera para ella. Gracias a eso mi hermana al menos tiene algo que hacer y ganaba más dinero en una tanda de wafflen q yo en un fin d semana de funciones (Claro, depende si es temporada alta o baja).

Me daba cuenta mientras pasaba x los pasillos q mi hermana hasta saludaba a los señores de limpieza, mientras yo siempre los miraba de lejitos xq me daba vergüenza hablar con ellos (Y si no tienes nada d hablar con alguien, mejor no hablar, no?). Sólo soy “amiga” de una d las d limpieza (Mi hermana se lleva mejor con ella). A cada persona q pasaba a su costado, aunque fuera una profesora q no le había enseñado, ella le saludaba y a veces le llamaba x un apodo. Incluso a los muchachos del personal de limpieza, a los cuales siempre tuve miedo x el simple hecho de ser hombres, ella saludaba por el nombre. Ella con todos conversaba y reía, mientras yo a su costado callaba y me preguntaba por qué había desperdiciado así mi tiempo en el colegio. La razón x la q fuimos era xq ella le quería dar un regalo a las dos señoras q normalmente venden en el kiosco. Son un mate d risa, me hic amiga d ellas antes q Vale un día q fuimos a matricularnos y luego me paraba a ver los dulces, a pesar d q no tenía plata para comprar. Luego fui conversando un poco con ella cuando estaba desinhibida y hablaba d todo. Ellas tb le dieron un regalo, medio incómodas xq yo estaba ahí. “Ay, disculpa pajarito (Así me dicen ellas), no sabíamos q ibas a venir”.Trataba de vender las últimas galletas integrales q quedaban en el kiosko (Último día de clases, la pobre señora del kiosko se estresaba cada vez q tenía q repetirle a la misma persona, por quinta vez, q no quedaba nada, ni siquiera un caramelo), cuando se apareció una d mis hijas. Es q yo tb fui animadora de Primera Comunión (Catequista), junto con Claudia y Kikí. Cómo han cambiado algunas, cómo han crecido todas!!! Y me sorprendí d q se acordaran d mí, a lo q Vale me respondió: “Aquí hay gente q religiosamente me pregunta x ti, incluyendo a tus hijas, algunas alumnas y profesoras”.

Terminó el recreo y me fui a dar una vuelta a ver a las profesoras. Me quedé un rato con la de música, ella se quejaba x la incomprensión d las alumnas con ella. “He hecho todo x ayudarles, ahora inclusive usamos libro y las hacemos investigar, pero dicen q no entienden”. A mí me parece super genial q les enseñen ahora teoría d la música, a mí me hubiera encantado. Pero me daba pena xq están acostumbradas a q les den todo masticadito, viven en una burbuja rosada y cuando salgan a la realidad les va a chocar un montón. Es q la clase de música, junto con la de dibujo, eran las más flojas.

Busqué también a mi tutora de 4° de secundaria, x la cual siento mucha ternura. Es d las típicas viejitas flaquitas y arrugaditas con el pelo cortito y oscuro q t enseñan ciencias, son super estrictas pero a la vez super amorosas y dulces. Todas la detestaban x lo primero. Yo la amaba x lo segundo. La llamaban “La mosca” x los anteojos q usa. Y no la encontré U_U. Y decidí pasar x la dirección a saludar a mi profesora de alemán de mis dos últimos años (Akí 4° y 5° de sec), mi tutora en el último y actual directora del colegio (sí, escaló altísimo!). Una rubia alta, delgada, con un castellano masticado (Típica alemana) me sonrió desde su escritorio y me invitó a pasar. Tenía un montón de hojas en las manos, pero las dejó a un costado. Me quedé conversando con ella, el tema de fondo era mi hermana. Todos están super preocupados x ella, xq saben de su situación. Si vieran cómo la adoran! Ella estaba preocupada x cómo se sentía, como siempre me ha dicho. Y me pidió q la apoyara. “Es q tampoco es tan fácil lidiar con ella, le tocas el tema y se pone a la defensiva y llora”. Luego le comenté q un amigo me había estado pidiendo q le enseñe alemán y q revisando mis hojas me di cuenta d q me estaba olvidando del idioma, y me dijo q cuando quisiera podía ir a sacar libros a la biblioteca de alemán. Le respondí q tenía un par en mi casa q siempre me olvido de ir a devolver. Al final nos despedimos con un abrazo y me dijo q me extrañaba, sólo xq yo se lo dije primero. No le creí cuando me lo dijo, pero igual me sentí contenta, xq quiero mucho a esa Frau: es muy linda, toda maternal y suave!

Ahora veo cómo las chicas tienen una relación super especial con sus profesoras, se bromean, son amigas. Yo nunca pude ser así con ninguna ni siquiera con la actual directora, xq siempre estaba de un lado a otro, correteando xq tenía clases q dar. Nunca me preocupé x tener muchos amigos, más d los suficientes. Ahora q regreso de la calle a aquel mundo lleno de amor veo la importancia de la educación en la niñez, más si se trata una educación en valores y llena de dedicación y amor. Yo recibí mucho cariño de mis profesoras, pero quizás para una niña tímida y sensible como yo fue poco. Y la actitud y el comportamiento de mis compañeras influyó mucho en mi forma de sentirme conmigo misma y mi desarrollo.

Si hay algo q reconozco es q mi colegio tiene un muy buen nivel: 2 idiomas con certificado además de una enseñanza minuciosa del español, ciencias completas, historia, religión, mucho arte (X eso era conocido mi colegio, aunq ahora se ha perdido mucho. El auditorio es alquilado para muchos shows de fuera, como ballet y música), y sobretodo valores en todo lo q se hacía. Dicen q las exalumnas d mi cole son fáciles de diferenciar x eso. Las q ahora están pasando a quinto tienen todas las herramientas para conquistar el mundo. Pero desgraciadamente veo q en las chicas q están ahora q piensan q la vida es un juego, q todo se puede comprar, traen cosas q vienen de sus casas pero q definitivamente no ayudan. En fin, será q aún son niñas y q lo han tenido todo fácil. Lo q sí sé es q cuando salgan a la calle y tengan q velar x sus intereses, preocuparse x la competencia real, conseguir su comida, su casa, su carro y su propia vida x su propio trabajo, con su esfuerzo, sin ayuda de mami o papi o Frau Brigitte o Frau Blanquita o Frau Rosita o quien sea; ahí van a ver, como todas las q ya hemos salido del nido, q las cosas no son tan fáciles. Van a extrañar un montón a esas personas siempre cariñosas. Van a extrañar q les presten atención, q no sea una alumna más o incluso un número de matrícula, sino una persona con una historia.

Esa tarde en el colegio, volviendo a mis pensamientos de niña, me puse a pensar: xq el mundo de los adultos es tan difícil? Xq la sociedad es como es, consumista, superficial, interesada, egoísta, ciega? Sería tan bueno seguir siendo una niña para siempre, sin preocuparse de tantas cosas (Aunq la verdad en mi caso empecé a preocuparme por cosas de adultos desde mucho antes q las demás de mis compañeras), con las únicas obligaciones de tener q estudiar y sacarse buenas notas para salir bien en el año y no preocupar a mamá y papá...

Sería tan bueno si todos los adultos conserváramos esa inocencia del niño, q lo ve todo nuevo, mágico, q piensa en los demás y es sincero, xq sabe q si tratas a los demás como quieres q t traten a ti serás respetado!

Xq los adultos tenemos q pasar x encima de otros cuando se trata de defender nuestros intereses?

Sacar la vuelta a la pareja, x disfrutar del placer del momento, creando más problemas después xq termina enganchándose con la persona...

Serruchar el piso y desplazar a las personas q pensaban q lo tenían todo seguro, x el simple placer de sentirse superior o quizás x q es más competente, sin preocuparse x cómo se siente esa persona...

Olvidarse de la familia, de la naturaleza, de sí mismo, x vivir en un mundo donde más importante es “estar” y “hacer” q “ser”...

Vivir estresado, sin pensar, sin meditar las cosas q se hacen, las palabras q se dicen, qué está haciendo con su vida y la de los q lo rodean...

Preocuparse x su desarrollo y el d su familia cercana, sin ver el mundo como un conjunto...

No disfrutar de las cosas pequeñas, x miedo al ridículo, xq “son niñerías” y ya a nadie le interesa mirar el cielo o hablar con las flores o treparse a un árbol o acariciar un perro o al menos observar la forma en la q caminan las personas del entorno, si tienen alguna preocupación, si quizás tiene una historia q contarles con cada gesto...

O alegrarse xq el sol salió, una mariposa revoloteó alrededor suyo, pintó una pared con pintura o hizo algo q no suele hacer...

No quiero crecer. Si crecer significa convertirme en una vieja amargada, superficial y ciega, no quiero ser adulta. Quiero ser una niña para siempre. Xq todo es una novedad. Xq no existe la vergüenza, xq siempre se dice la verdad, xq nada tiene malicia. Xq no se juzga a los demás, q no son malos, sólo tienen miedo de ser heridos x gente q como ellos, hiere xq tiene miedo de ser heridos también. Xq cada momento es precioso. Xq cada persona debe ser diferente. Xq no somos una masa, somos independientes. Xq del resto se aprende mucho. Xq ser adulto significa tener conciencia de todo lo anterior, pero esta vez conciencia cabal de los actos y experiencia de lo bueno y lo malo. X eso quiero ser una adulta niña.